El “niño” atrapado
en la tristeza
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Por Oscar Andrés Aguilar Pardo
Aunque la impresión inicial es que la
película trata sobre la historia de un niño huérfano que vive en una estación
de tren y que se ocupa del mantenimiento de los relojes, en realidad la trama
corresponde a la vida del cineasta Georges Méliès (personaje histórico) después
de que pierde su negocio como productor, actor, guionista y especialista en
efectos especiales.
Es algo así como si el “Steven
Spielberg” entre 1896 y 1913 tiene que dejar por completo su profesión y queda
para vender y reparar juguetes en un local en la estación del metro.
Las primeras escenas de la película
nos dan la clave:
El niño Hugo representa al “niño” de
Georges Méliès quien se encuentra atrapado en el tiempo con el corazón
entristecido.
A través del ojo (la ventada del
corazón) de George Méliès sabemos que “el tiempo está atrapado en su
corazón” y que dentro de ese tiempo está “el niño” de Georges Méliès.
La postura rígida de Georges Méliès
nos remite al muñeco autómata su movimiento con los brazos para atrapar a Hugo
es paralelo al movimiento del muñeco autómata cuando se activa. Es más las primeras imágenes muestran a Melies detrás de una mesa, como el autómata. Esto nos
indica que el muñeco y Méliès son la misma persona y que Méliès busca atrapar,
es decir, recuperar a su “niño interior” y para eso le tiende la trampa con el
ratoncito mecánico.
El misterio del autómata es encontrar
la llave que active el mecanismo de su corazón (de Méliès).
Méliès prácticamente sólo habla con
su sobrina, quien es quien tiene (colgando a la altura de su corazón) la llave
para abrir el corazón del autómata, es decir, el tío.
Hugo en realidad no existe nadie en
la estación se ha fijado en él. aunque Hugo roba comida y tiene pesadillas, en realidad no se lo ve comerse un bocado ni que en realidad lo hayamos
visto, dormir, ir a la escuela, al baño y sólo conversa con la sobrina de
Méliès.
El papá de Hugo, como Hugo, tampoco
existe. Él representa al fanático del cine que aparece al final y quien
recupera las películas de Méliès que estaban en un estado similar al estado del
muñeco cuando el papá de Hugo lo encontró en el museo donde Méliès lo había
dejado.
Con estas claves considero develado
el misterio de la película.
El resto de los personajes lo que
buscan es encontrar la “llave” del corazón de su amada. El inspector debe encontrar la sonrisa que perdió en su infancia y por la guerra. El señor mayor de la bufanda debe darse cuenta que su "llave" es es ocuparse no solo de la señora del perrito sino de las necesidades de ella, solucinándole el problema de soledad de su perrito.
Caracas, 3 de marzo de 2011
Oscar Andrés Aguilar Pardo
oscarandresaguilar@gmail.com
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sábado, 3 de marzo de 2012
La invención de Hugo
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